FRANCISCO FUSTER RÚIZ, catedrático de Biblioteconomía de la Universidad de Murcia en el prólogo de mi libro “LA ANTIGUA PROVINCIA DE CHINCHILLA Y LA CREACIÓN DE LA PROVINCIA DE ALBACETE”.

Estamos ante un libro totalmente necesario para la historiografía de la provincia de Albacete. Un libro en el que se estudie su nacimiento, su génesis como entidad supramunicipal y supracomarcal. Desde el punto de vista provincial todo lo anterior a 1833, excepto el breve paréntesis de 1822-23, constituye la prehistoria, los antecedentes históricos individualizados por pueblos y comarcas; y sólo desde el Decreto de Javier de Burgos podemos hablar de eso que se ha convertido en tan entrañable para todos, manchegos, serranos o levantinos, en estos 157 años de convivencia y hermanamiento: de la provincia de Albacete.

El autor estudie esta génesis a través de un largo período histórico, 1785- 1833, en el que se va viendo la necesidad perentoria de la creación de una nueva provincia que aglutinara los pueblos y territorios que estaban en el vértice de aquellas provincias-monstruos creadas por Floridablanca: Murcia, Cuenca y La Mancha. Las enormes distancias geográficas con las respectivas capitales hacían totalmente imposibles los lazos humanos y administrativos de los habitantes de la comarca de Alcaraz con Ciudad Real, de los de La Roda con Cuenca, y de los de Albacete y Chinchilla con Murcia. ¿Cómo podían sentirse murcianos los vecinos de La Gineta o de Casas Ibáñez? ¿Cómo podían sentirse identificados con los de Ciudad Real los vecinos de Elche de la Sierra o Riópar? Y para deshacer aquel artificio monstruoso de Floridablanca era necesario crear otro artificio menos disparatado y más operativo, reuniendo territorios cercanos y afines en una nueva configuración administrativa que hermanara sus problemas y sus ambiciones de ser algo en el mapa general de España. Este hermanamiento impuesto desde el poder político hace a las gentes de estos territorios que primeramente se sientan chinchillanos y, después de esta efímera experiencia no baldía, definitivamente albaceteños. Es decir, copartícipes de una misma ilusión territorial, de un mismo destino geográfico, administrativo y político, y, en definitiva, histórico.

A fines del siglo XIX un erudito foráneo lanzó la peregrina idea de que Albacete no tenía historia. Y los albaceteños de principios del XX se ilusionaron con esta teoría, que cuajaba plenamente con su mentalidad dinámica y futurista: “Es cierto, no tenemos historia. No hay nada que nos ate con el pasado. Podemos, nosotros mismos, crear un futuro más espléndido. La historia de Albacete la estamos haciendo, desde 1833, nosotros solos, los albaceteños de la Edad Contemporánea, la de las libertades y el progreso; los albaceteños de la España del futuro y de la modernidad”. Era una idea vitalista, muy relacionada con aquella de “poner siete llaves al sepulcro del Cid”, que ha influido bastante en la configuración de la mentalidad modernista de una capital provinciana que, por este espíritu más que por su urbanismo, fue definida certeramente por Azorín como “la Nueva York de la Mancha”.

Pero estaban tan equivocados en cuanto al destinatario de la frase como el propio autor de la misma. Amador de los Ríos, el erudito decimonónico que ni siquiera pudo vislumbrar nuestra historia, se equivocaba también en esto. Se refería a Albacete-capital de provincia, que sí que tenía un pasado histórico impresionante y magnífico, que por fin está siendo ahora rescatado del olvido, cuando en realidad, inconscientemente, quizás se refería a Albacete como provincia. Y ésta sí que carecía de historia. Tan sólo desde 1833 era algo propio e individualizado en el cuadro general de la historiografía española y universal.
Pero este hecho no era negativo sino tremendamente positivo y vitalista. Una provincia sin ataduras anquilosadas del pasado podía, con el esfuerzo de sus hijos, elaborar ella misma el futuro más brillante y esperanzador. Y esta mentalidad de la capital, que poco a poco fue cuajando en el resto de la provincia, es lo que ha conseguido superar todas las adversidades de la tremenda pobreza de estas tierras, de la falta de medios culturales y sociales, y la que finalmente, después de 157 años de historia lanzada hacia el futuro, no anquilosada en el pasado como ha sucedido a otras provincias castellanas, ha conseguido que Albacete hoy, en 1990, figure muy dignamente en el cuadro general de todas las provincias de España.
Pero esto ya es historia contemporánea de la provincia de Albacete, y lo que el autor intenta -y lo consigue plenamente- es describirnos su nacimiento, no su evolución posterior. Por eso no abunda demasiado en los acontecimientos de 1833 y le preocupa más lo anterior, desde el punto de partida que suponen las reformas territoriales de 1785.

La inmensa extensión de aquellas provincias de Floridablanca, hacían necesarias nuevas reformas administrativas, para conseguir unas demarcaciones territoriales donde la acción del Gobierno central y provincial fuera más operativa y dinámica y los gobernados se sintieran más protegidos en sus intereses. La necesidad de la reforma era evidente de arriba hacia abajo, desde el Gobierno hacia el pueblo, y también desde abajo hacia arriba, pues los ciudadanos querían estar más cerca de unas Instituciones provinciales que tan directamente les afectaban y en las que todos, como es lógico, deseaban intervenir. Este pensamiento y esta necesidad estaban inmersos en la misma conciencia de crisis del Antiguo Régimen. Por eso las reformas triunfan en los momentos liberales: los afrancesados de José I, las Cortes de Cádiz, el Trienio Constitucional y, finalmente, en el advenimiento del Liberalismo. Ángel Ñacle estudia pormenorizadamente cada uno de estos períodos, sacando a las fuentes documentales todo su partido.

… Ángel Ñacle es un albacetense enamorado de su tierra y de su historia. Y digo albacetense en el sentido provincial de la palabra, no en el sentido local. Porque, aunque nacido en la capital, para él toda la geografía inmensa de la llanura manchega, de las Sierras de Alcaraz y de Segura, de las hoces del Júcar y el Cabriel, desde Villarrobledo a Caudete, desde Nerpio a Villatoya, desde Hellín a Minaya, a todo lo largo de la rosa de los vientos, son Albacete. Y ha estudiado su Albacete despacio, como deben hacerse las cosas, con la paciencia y el tesón de un verdadero y fiel enamorado. Impulsor y Presidente del Centro Excursionista de Albacete, ha caminado, con sus enormes botas de siete leguas, todos los caminos de la llanura y todas las crestas de las sierras; ha sentido su ánimo sobrecogido ante la necesidad de defensa del medio ambiente y para él la ecología es casi una nueva religión; ha consagrado su vida a la defensa del patrimonio histórico y monumental de la provincia, y sus ojos, limpios por la contemplación de tantos horizontes de verdadera grandeza, están tan sólo fijos permanentemente en todo cuanto sea noble, justo y grandioso.

JOSÉ PRAT GARCÍA, en el prólogo de mi libro “EL ATENEO ALBACETENSE”.

 PRÓLOGO A LA “HISTORIA DEL ATENEO ALBACETENSE”

DE D. ÁNGEL ÑACLE GARCÍA

Muy meritoria tarea la cumplida el profesor D. Ángel Ñacle al escribir la “Historia del Ateneo Albacetense” y ofrecernos como resultado de su muy cuidadoso estudio de documentos y testimonios, de libros y periódicos, lo que ha sido la vida cultural de nuestra ciudad a través de un siglo de vida de su Ateneo. Sociedad ésta, como nos dice el autor,

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Nos cuenta Ángel Ñacle como el Ateneo necesitó una segunda fundación en el año 1907 y nos habla de los intelectuales que trabajaron en él en esos años. En mis recuerdos destaca

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El haber vivido yo fuera de Albacete desde 1917 y de España muchos años, tiene singular compensación: la emoción íntima del recuerdo, enriquecido ahora con la lectura de este libro de Ángel Ñacle, tan valioso en la presente y espléndida nueva etapa del Ateneo de Albacete. 

TOMAS MANCEBO JIMÉNEZ, presidente, en el prólogo de mi libro “EL ATENEO ALBACETENSE”.

La lectura del libro te hará evocar lugares de la ciudad y personas… pero esta obra no hubiese sido posible sin la intervención de Ángel Ñacle, persona dedicada a la docencia, amante de la Historia, admirador de la naturaleza e investigador nato, que ha sabido construir un sentido vital e integrador de la cultura.

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Se hace notorio en Ángel Ñacle, su admirable y sorprendente perseverancia en el trabajo intelectual arduo, afrontándolo en circunstancias difíciles que justifican a veces la dispersión en nos movemos. Ha tenido que recopilar ciento trece años de historia, partiendo de la nada, y, dada la gran confusión de los testimonios existentes, comprobados dato a dato, por ello, las fuentes a partir de las cuales elaboró su trabajo son variadas: entrevistas, fotografías, archivos… Con frecuencia su tarea no ha sido sencilla, por lo que, como meros observadores de este libro, nuestro juicio debería ser positivo.

MARCIAL MARÍN HELLÍN, Consejero de Educación, Cultura y Deportes de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, en la Introducción de mi libro “ANDAR POR EL PARQUE NATURAL DE LOS CALARES DEL MUNDO Y DE LA SIMA”.

En Castilla-La Mancha, nuestra región, existen nada menos que ocho Parques Naturales, tres de ellos en Albacete, son los de Las Hoces del río Cabriel, Las Lagunas de Ruidera y el que hoy prologamos: el Parque Natural de los Calares del Mundo y de la Sima, en lo más quebrado de la Sierra de Segura, espacio protegido que fue creado el 5 -5-2005 (curiosa coincidencia) y, por tanto, casi podríamos decir que es nonato, iniciando su andadura hace solo media docena de años.

No obstante, le ha faltado tiempo autor para adelantarse y ofrecernos hoy una obra totalmente necesaria, tanto para la bibliografía de la provincia como para el propio Parque, que encuentra así un apoyo externo, libre de toda influencia endógena, que, en cierto modo, viene a complementar la labor y el trabajo de la Administración

Efectivamente, Ángel Ñacle, es un hombre enamorado de su tierra, no lo vamos descubrir ahora, seducido por esa rosa de los vientos que es la provincia, esta provincia nuestra que ha recorrido con sus botas de siete leguas de norte a sur y de este a oeste, a lo largo de una vida dedicada en gran parte a esa labor tan gratificante de enseñarnos lo que tenemos, ese marco biogeográfico que enmarca a los pueblos y sus gentes; y en este marco afectivamente tan cercano, primordialmente, ese pedazo de 19.000 Ha que forma el Parque Natural de los Calares cuyo inestimable valor muchos todavía desconocen; de ahí el valor que el libro guarda, no solo de conocimiento, sino como medio de difusión, aunando en un objetivo único amor, defensa y publicidad de un espacio tan sumamente atractivo y singular de nuestra tierra.

Una clara trayectoria humana la del autor que transmite de manera limpia y clara, al tiempo profunda y apasionada, el arraigo y aprecio por las raíces propias. Ángel Ñacle es profesor de los “de a pie”, y como tal -y el mismo lo dice en su sentido Prólogo-Epílogo de este libro- ha ejercido y ejerce su actividad pedagógica más allá de las aulas, llevándonos a través de sus libros y artículos de prensa a conocer los aspectos más diversos de la provincia de Albacete: vías pecuarias, artesanía, tecnología popular, instrucción primaria, la creación de la provincia, el Ateneo Albacetense, construcciones tradicionales, fiestas y tradiciones, los pueblos… un cúmulo de trazos y perspectivas que nos acercan al conocimiento de lo propio y genuino.

A ello suma la singular aventura del montañero experimentado que nunca escribió de foráneas expediciones, pero si detalló escrupulosamente cada rincón de las hermosas, acicaladas, Sierras de Alcaraz y Segura sin perder ese norte didáctico tan sugestivo y necesario que es innato en él.

 Como no podía ser menos, hoy nos sorprende con un trabajo de paciencia y tesón, sobrecogido el ánimo ante la necesidad de la defensa del Medio Ambiente. Por ello tenemos ante nosotros un libro tan necesario como ameno, tan meticuloso en los aspectos geológicos del ecosistema cárstico como acalorado “mostrador” de pueblos, montes ríos, plantas y gentes, paseando, siempre andando, a través de veinticinco rutas por este maravilloso Parque Natural que hoy tiene un instrumento más para ser mostrado y recorrido. 

HIGINIO OLIVARES SEVILLA, presidente de Caja Rural de Albacete, en el prólogo de mi libro “ALBACETE. NUESTRA TIERRA”.

A MODO DE PRESENTACIÓN

Es posible que lo mejor un libro sea el interés que te despierta por conocer más sobre el tema que trata. Así las cosas es asumible entender la verdad que se encierra en ese principio que dice que “cuanto más se lee, más necesario se hace leer”.

Soy de Albacete y amo profundamente esta tierra. Ahora sé lo poco que la conozco, pero tengo muy claro lo que siento por ella y la extensión de ese sentimiento.

Por eso, porque la relación con mi entorno geográfico es de necesidad, mi corazón ha determinado que no hay mejor tierra que mi tierra para vivir la vida que he vivido y la que me quede vivir.

A Ángel Ñacle García le agradezco profundamente este libro que tenemos en las manos. Nada sabía de su extensa obra, nada sabía de esa vocación que lo une al paisaje de Albacete volcado en la misión casi testamentaria de legárnoslo a pueblo, piedra a piedra, paso a paso.

¡Qué hondos, sinceros y nostálgicos recuerdos se han amontonado en mi corazón! Y es que, de una forma intensa y a la vez involuntaria, en cada paisaje y en cada costumbre he reconocido mis raíces y por tanto mi propia identidad. No importa si el pueblo que me vio nacer está rodeado de horizontes sin más obstáculos para la vista que los campanarios de iglesias más o menos lejanas. No importa si la tierra qué recogió mis primeros pasos es sobria y mística como las paredes que enmarcan las viejas construcciones manchegas. No importa, digo de nuevo, porque me he reconocido y emocionado a lo largo de las hermosas páginas de este «Albacete. Nuestra tierra».

Para la Caja Rural de Albacete es un privilegio colaborar con esta obra que es como un estuche que guarda para la posteridad nuestras costumbres y el paisaje que les sirvió de escenario; una hermosa caja que con sólo a abrirla nos pone ante los ojos lo que somos, lo que fuimos, lo que no podemos perder.

Gracias ahora y siempre a Ángel Ñacle por recorrer incansablemente cada pedazo de esta tierra y ponerla hecha libro -hermosísimo- delante de nuestros ojos y de nuestra alma. A nadie defraudará.

Ángel Ñacle le dedica este libro de forma especial a su nieto, a quien le lega su amor por nuestros pueblos, por nuestras raíces… Yo también recibo para mis nietos el premio de su esfuerzo que nos habrá sido que no habrá sido en vano. Lo digo con emoción.

Gracias 

PATRICIO MORCILLO ORTEGA Y AUGUSTO HUÉSCAR MARTÍNEZ, presidente y secretario de la Asociación Cultural Albacete en Madrid, en el prefacio de mi libro “TIERRA DIVERSA”.

Ya lo decía Luigi Pirandello cuando escribió su famosa obra “El difunto Matías Pascal”: “¡Cómo me había hecho yo la ilusión de que un tronco podía vivir separado de sus raíces!”. En efecto, por mucho que los cambios que nos ofrecen las sociedades actuales transformen nuestras existencias y no nos quede otra opción que la de adaptarnos constantemente a dichos cambios para sobrevivir, seguimos atados a nuestros orígenes. Solamente es posible construir a partir de lo que somos y, lo que somos, viene determinado, en gran medida, por los valores, convicciones y conductas adquiridas «por herencia».

En este contexto debemos situar las investigaciones desarrolladas por Ángel Ñacle. Su afán por conocer, sobre el terreno, y en profundidad la provincia de Albacete, su cultura, su historia, su geografía, su naturaleza y su gente nos ayuda, con criterio, a entender mucho mejor «lo que somos» y lo que, en consecuencia y en un futuro, podremos hacer.

Está obra, “Tierra diversa”, se estructura en cuatro partes perfectamente delimitadas. La primera, refleja el medio natural, la segunda el medio histórico, la tercera nos propone un recorrido por el arte y la cuarta parte se centra en las manifestaciones etnológicas más relevantes de la provincia.

Cuando aborda el medio natural detalla de manera pormenorizada desde la geología hasta los espacios naturales protegidos. También, y en sentido positivo, ya que su obra no solo es un diagnóstico de la situación, sino que aporta soluciones de mejora, reclama la ejecución de acciones necesarias para que se mantenga y recupere, en su caso, el valioso y diversificado patrimonio provincial.

Cada una de las secciones contempladas en esta parte enriquecen los conocimientos del lector. Por poner un ejemplo, al referirse a la hidrología, destaca características singulares y muy poco conocidas del Río Mundo. Informaciones como el que moviliza mayor caudal que el río Segura en el que desemboca, a pesar de que éste tenga mayor longitud.

La investigación sobre los aspectos históricos es la más extensa de la obra. Parte de la Prehistoria y finaliza en el primer tercio del siglo XX. Agrega una sección dedicada a la creación de la provincia de Albacete y a las vicisitudes que la convirtieron en la capital provincial. Partiendo de la premisa que la historia presente no es solamente el reflejo o la extrapolación del pasado, el autor aporta unas claves para entender mejor la compleja actualidad social que se caracteriza por una multiculturalidad o una diversidad cultural que requiere la aceptación de nuevos valores, convicciones y pautas de conductas para que la integración sea enriquecedora.

En la parte tercera, dedicada al arte, se reúne un amplio número de expresiones artísticas. La presentación comienza por el arte durante la época del Islam, califal, almohade y mozárabe que se desarrolló entre los siglos XI y XVI. Cabe señalar que en capítulos previos del libro ya se evocan las aportaciones que se realizaron en épocas anteriores. Tras este análisis, el autor va repasando las obras góticas catalogadas (siglos XIII a XV) y completa su estudio con las construcciones atribuidas al Renacimiento, al Barroco, al período Neoclásico y a la arquitectura contemporánea albaceteña. En cada caso, hace referencia a expresiones artísticas de carácter religioso y civil, tanto en el área de la escultura, la pintura como de la arquitectura. Es de resaltar que en esta última área se hace hincapié en inventarios de fortalezas, torres, atalayas y castillos.

El hecho de que nuestra provincia haya sido tenida como tierra de paso, justifica que en todas las épocas se hayan erigido fortificaciones, con apoyo en accidentes naturales o no. No obstante, no es habitual que Albacete se considere como una tierra de castillos. Según los datos registrados, se han podido documentar algo más de 60 castillos, de los que sólo quedan muestras arqueológicas de 45.

Para los albaceteños y otros foráneos atraídos por la riqueza cultural, en el amplio espectro que ofrece la provincia, leer “Tierra diversa” constituye un aprendizaje de gran valor intelectual. Se trata de una obra indispensable para todo aquel estudioso o investigador interesado por el origen y el desarrollo cultural, económico, político y social de la provincia de Albacete.

Ante un libro así una pregunta frecuente es cuánto tiempo se requiere para prepararlo. A Jacques Barzun le hicieron similar pregunta respecto a su obra “Del amanecer a la decadencia” y manifestó: “Toda una vida. Los estudió sucesivos van haciendo acopio de datos y encaminan a nuevas perspectivas y conclusiones que son los que aquí se presentan”.  

EMILIO MARTÍNEZ ESPADA, periodista, en el prefacio de mi libro “PAISAJE Y RUTA”

 UN ÁNGEL SUBLIME SIN INTERRUPCIÓN

El poeta maldito Baudelaire exigía a los que aspirasen a la catadura de genios que fuesen sublimes sin interrupción. Algo que se ajusta de manera pintiparada, y “per omnia saecula saeculorum», al que sin duda es el mayor, y mejor, conocedor de la provincia en todos sus aspectos. Sí, a este banderín de enganche del albaceteñismo que hace honor a su nombre. Naturalmente, pongamos que hablo (escribo) de ese ángel laico de apellidos Ñacle García. De ese hombre pleno y maduro que ya desde los tiempos de la legendaria Academia CEDES -donde coincidimos- se adornaba con el brillo de la inteligencia, el peso de la cultura y el sello de la sensibilidad; todo ello bajo el denominador común de sus múltiples inquietudes. De este personaje que se ha pateado durante cerca de medio siglo, no kilómetro a kilómetro ni metro a metro, sino milímetro a milímetro todos los “Paisajes y Rutas» (cual el título de este imprescindible libro) de las tierras de la provincia de Albacete.

Fruto de estas casi cinco décadas de trabajo desinteresado, del que ya han salido multitud de otros interesantísimos libros, es ahora esta visión global de la provincia de la que podemos, y debemos, disfrutar en “Paisaje y Ruta”. Todo un compendio integral de esa a veces -¡ay!- tan desconocida o poco valorada tierra por parte de los propios albaceteños, quizás aún afectados por el samuguismo que tanto nos perjudicó desde siempre. Porque este personaje, también global, no se ha limitado solamente a andar, subir, ver, disfrutar de aquellos lugares por donde transcurren las rutas, incluidas las ascensiones, no. Pues, además de paladear el contacto directo con las gentes, ha sabido tomar nota de su sabiduría, al pasar o llegar a cortijos, aldeas o pueblos de los que deja constancia de sus costumbres, usos, fiestas, tradiciones, vocabulario… y, por supuesto, su historia.

Tal ha acontecido con el fabuloso trabajo de este genio “baudelariano” (perdonen el “palabro”), de este adalid de lo albacetense que no se resigna al exceso de humildad en desgraciada mezcolanza con el apestoso samugismo ya mencionado líneas arriba. Y que remedando, y superando, al legendario Labordeta y su “País en la mochila” ha echado en la suya, en este libro resumen y ampliación de muchos de los anteriores, todo Albacete. Ahí es nada, un total de treinta y dos rutas provinciales, divididas en cada uno de sus tramos -hasta la tan brutal como increíble cantidad de sesenta y nueve-, con unos textos no solo informativos y de fuerte impacto didáctico -para eso Ángel fue profesor-, sino también de una belleza inmarcesible.

Una belleza singular, como la que describe con ímpetu machadiano, golpe a golpe, línea a línea, que se complementa con sus maravillosas y creativas fotografías en las que el lector puede, y debe, apoyarse para en conjunto conocer, y amar, globalmente la tierra. Una tierra por la que pronto el autor de esta maravilla del libro sintió una vena reivindicativa para asumir una inigualable labor de divulgación. En definitiva, que gracias a este sublime he incansable ángel laico, a este intelectual a ras de tierra -y nunca mejor dicho/escrito-, los albaceteños podemos, y debemos, olvidar de una vez nuestra eterna poquedad, y cortedad samuga, y presumir a tope, y con argumentos “ñaclianos” (perdón de nuevo por el “palabro”), de nuestro Albacete. Y también hacerlo de uno de sus grandes y ejemplares personajes, que ha laborado sin descanso y desinteresadamente, se insiste, por su tierra. Baudelaire lo habría incluido, sin duda, entre esos escasos mortales con la catadura de genios y, por tanto, sublimes sin interrupción. Gracias por existir, Ángel.

JAVIER LÓPEZ-GALIACHO PERONA, presidente de la Asociación de Amigos de los Teatros Históricos de España en el prefacio de mi libro “IDENTIDAD”

ÑACLE, EL AVENTURERO

Dícese que la etimología griega de la palabra prólogo deviene de hacer un discurso preliminar en favor o hacia el autor de la obra o la propia obra. Gregorio Marañón, solicitadísimo siempre como prologuista, los redactaba como churros. «Comiendo”, decía el insigne doctor, “entre el primer y segundo plato”. Claro que entonces era más fácil porque alguno como él se sentaba a mesa puesta y con servicio de calidad desde el entremés hasta el postre.

Sin estar sentado a comer, y ni mucho menos que me sirvan la comida, sí que voy a prolongar esta enciclopédica obra de Ñacle en este tiempo que llamo del “café oficina”. Les cuento. Suelo llegar y me pongo un cafelito colombiano y dedico unos cuarenta y cinco minutos a mis lecturas. Siempre empiezo (con lápiz) por el Quijote, un poco de Montaigne, columnistas inspiradores como González Ruano, Martín Abril, el padre Martín Descalzo, y lo que toque, como ese Antonio Gala, inmortal, al que vamos a conceder un importantísimo premio de teatro como el Pepe Isbert.

Ángel Ñacle, compañero en tareas docentes universitarias, yo en el Derecho Civil, él en la Geografía, me ha pedido que le prologue este libro “IDENTIDAD” sobre las tradiciones y fiestas de los municipios de nuestro Albacete, las cuales conozco directamente al vivirlas en muchos pueblos de la provincia. Nací y me hice en Albacete. Mis abuelas eran de Valdeganga y de Munera; hecha la primera a orillas del río Júcar y la segunda criada en esa tierra cervantina que acogió las bodas de Camacho y muy cerca de la Osa de la cueva de Montesinos.

En favor del autor diré que Ñacle es un personaje barojiano, siempre en acción, de esos que podían haber estado comandando un batallón en las guerras carlistas, adentrándose en cada pueblo, en cada casa, colocando su bandera carlista o realista en la torre del campanario de la aldea ocupada. Pero como Ñacle es un personaje prolífico del siglo XX y XXI, ha cogido su mochila, papel y lápiz, cámara y acción, y nos ha contado en un sumatorio tetralógico de libros, el paisaje y la historia de Albacete. Por cierto, no se pueden separar. El paisaje condiciona la historia y la historia se lee en el paisaje, nos legó la Generación del 98.

Ñacle posee un don, porque es un regalo para él y los albacetenses, como es su reivindicación permanente de Albacete su naturaleza, sus pueblos, sus tradiciones, su historia y sus gentes. Y en esa defensa nos encontramos los dos. Por eso me ha pedido que me sume a su causa albacetense. Por definición reívindicar es pedir algo tuyo que se te ha quitado o birlado. El origen viene de la acción vindicatoria sobre la cosa (la “res” romana). Devuélvame mi cosa. Y si los albacetenses, como él, como yo, revindicamos permanentemente Albacete, es que tenemos un problema como ciudad, como provincia, y es que en el fondo alguien nos la ha robado. Y ese robo no es físico, más bien es que en España no se nos conoce, se nos ha maltratado muchas veces, nos hemos sentido despreciados (no apreciados) en lo que tenemos y en lo que somos. Porque tenemos una provincia maravillosa, naturalmente privilegiada, con el llano y la sierra. Y somos buena gente. Samugos, sí, parados sí, pero lo mejor que tiene Albacete es su gente.

Albacete ha carecido de líderes sociales y políticos que la hayan defendido, por eso necesitamos a los Ñacle que entregan en su vida y su tiempo a recordarnos que somos grandes, pues como dijo memorablemente Azorín, los albacetenses poseemos la más alta de las humildades, “pues siéndolo todo, os creéis nada”.

Saludo pues a este hombre de acción, también en lo literario como Ángel Ñacle y esta obra, que cierra su tetralogía: Tierra diversa, Paisaje y ruta, Albacete en 6000l imágenes y ésta, Identidad.

Una monumental obra ésta, repleta de “Identidades”, de etnografía, de tradiciones y fiestas de la provincia, que entronca, completándola, con aquella obra maestra que fue “Fiestas populares de Albacete y su provincia” que escribió una grande entre las grandes como fue Carmina Useros.

Ñacle en su “Identidad” hace un repaso, pueblo a pueblo, desde Abengibre hasta Nerpio (fielato hacia Andalucía), por las tradiciones y fiestas de nuestra provincia. Rreferencias cargadas o repletas de encierros, pasacalles, cencerradas, aquellos quintos (de la mili), encierros de toros tan nuestros como los de Ayna, los toques de campana (hoy patrimonio mundial inmaterial), la matanza del cerdo con ese olor que aún guardo en la pituitaria, el toro de fuego de Barrax, la rondalla, la noche de San Juán, las danzas como la del Garrote de la Ossa, los imponentes Moros y Cristianos de Caudete, los cantos o cruces de mayo, el “hombre del saco”, las coplas populares, las procesiones de ánimas, etc.

Pero también una obra que se vuelca con el patrimonio material de Albacete, como los cucos, eras, molinos, mojones, bardales, rastrillos, lavaderos, que marcan el tránsito de lo que fuimos, mientras nos advierten de lo mucho que podemos perder en esta sociedad digital, fría, impersonal, inmersos hoy en esta era del Covid-19

Es esta obra también un estallido de ciclo festivo, recordándonos, la alegría de vivir de las ferias y fiestas de Albacete y provincia. Desde la festividad de Año Nuevo o Reyes hasta ese “Zoreo” de Casas Ibáñez, donde los “guachos y guachas” de este querido pueblo ubicado camino de Ayora y de la Requena de Valencia piden el aguinaldo.

Confieso que me ha emocionado su lectura. Primero, porque Ñacle canta y cuenta lo que aún tenemos o conservamos y estamos, ojo, a punto de perder. Segundo, porque Ángel descubre, pone en el escaparate, el inmenso patrimonio natural y tradicional de este Albacete; y tercero, porque voy a hacer una confesión: nada me gustaría más que coger como un Labordeta por España, como un Cela en la Alcarria, o como este Ángel Ñacle, mi mochila y recorrer palmo a palmo, camino a camino, pueblo a pueblo, la provincia de Albacete, fuente donde no para de brotar la mejor gente, la que ha levantado en silencio esta España que a pesar de nosotros, los españoles, sigue en pie. Ñacle lo borda y lo ha conseguido retratar brillantemente.

Gracias, Ángel. Como el Zalacaín de Baroja, eres un escritor aventurero. Has reflejado perfecta y fielmente nuestra “Identidad”; y me has hecho, nuevamente, sentirme orgulloso de ser albacetense.

Solo me queda dejar como cierre a las palabras que me pide, honrándome, el autor, esa leyenda de la identidad albacetense que creó el maestro Azorín con tan solo, no podía ser menor en su prodigioso estilo sintético, la unión de dos palabras que juntan son una declaración de amor: “Albacete, siempre”. 

 ENTREVISTA EN EL PERIÓDICO SEMANAL “EL PUEBLO DE ALBACETE”

 Ángel Ñacle es un autor muy prolífico cuyas obras despiertan cierto interés entre los lectores, sobre todo aquellos interesados en los temas locales. Quizás la temática por la que es más conocido sea el senderismo, aunque a él no le gusta llamarlo así ya que no es lo más correcto, el término montañismo se adapta mejor a lo que hace; el caso es que durante treinta años se ha dedicado a recorrer la sierra pateando cada uno de los rincones, aun los más inaccesibles, y subiendo a todos, a todos, los picos y las cimas superiores a los 1.500 metros de altitud de la provincia. Fruto de ello es una decena de publicaciones en la que se recogen alrededor de trescientos caminos de herradura, caminos históricos que desde tiempos inmemoriales anduvieron hombres y bestias en su trajinar diario y que aunque se pierdan físicamente, al menos han quedado escritos y su recuperación se puede llevar adelante en cualquier momento. Es, sin duda una labor importante porque la sierra, que parece tan grande, es un pañuelo -a decir de él- y andando, recorriendo, los diez o doce caminos más importantes de cada municipio la tenemos totalmente comunicada, una red de caminos que ya han quedado impresos en esos libros y que quizás algún día sirvan como base a un proyecto global y sostenible de dinamización turística de la sierra. Es curioso que habiendo sido el máximo responsable del montañismo en la región, Presidente de la Federación y miembro de la Nacional, habiendo por ello participado en expediciones de índole nacional e internacional nunca haya escrito ni una línea sobre ellas “son vivencias que se llevan dentro, es tanto lo que significan que prefiero que se queden conmigo, guardarlas como una reliquia”; en cambio para nuestra provincia es diferente, piensa que “como albaceteño nuestra primera misión es trabajar por nuestra tierra, darla a conocer, difundir y divulgar los valores que posee porque si no lo hacemos nosotros nadie lo hará. Se tacha de chauvinistas a los franceses y de nacionalistas a los catalanes pero es que ellos si que saben lo importante que es hablar y que se hable de sus respectivos territorios, los manchegos somos llanos en demasía, apocados, humildes como cantara Azorín, cuando tenemos tantas y tantas cosas que mostrar, por eso estoy convencido de que los ciudadanos de a pie también tenemos esa obligación de publicitar nuestra tierra, y yo estoy en ello, aunque sea de puntillas, aunque nadie a nivel político-administrativo así lo testimonie, pero en cambio cuento con el reconocimiento de tantos paisanos y paisanas que sí deben agradecerlo porque llaman, escriben o, incluso me preguntan por la calle lugares a los que ir o problemas que detectan en sus pueblos, en el medio natural, claro. Sin duda es una satisfacción”.   

          Otra faceta como autor, y como historiador que es, son los libros de investigación histórica, de ellos cuenta con media docena larga y varios ensayos, por ejemplo el primero fue su Memoria de licenciatura “La antigua provincia de Chinchilla y la creación de la provincia de Albacete”, donde se recogen las vicisitudes y enfrentamientos entre Chinchilla y Albacete por ser capital de la nueva provincia que se iba a crear y se analizan todos los proyectos de división territorial desde 1783 hasta el nacimiento de la provincia de Albacete en 1833, libro del que se hicieron dos ediciones. El último es su tesis doctoral que lleva por título “La Instrucción Primaria del siglo XIX en la ciudad de Albacete”, una obra que recoge todos los aspectos de la enseñanza: leyes de educación, maestros, alumnos, escuelas, salarios, libros y material, Inspección, y problemática en general de la enseñanza en nuestra ciudad desde el mismo momento de su creación hasta el año 1901 en que se creó el Ministerio de Instrucción Pública. Comenta que “no obstante su interés los trabajos de investigación son muy arduos, llevan años de archivo y de una dedicación intensiva que luego no se refleja a nivel general como ocurre con los anteriores, la satisfacción es totalmente personal, en cierto modo ello lleva implícito algo de intimismo, si se permite la expresión”. Como profesor en el IES Julio Rey Pastor la labor docente es, probablemente, lo más importante y considera fundamental el saber trasmitir los saberes históricos a los alumnos, “es un peñazo de asignatura para la mayoría, pero al final del curso no puede uno evitar pensar que algo habrá quedado y seguro que algo de la historia local habrán aprendido, cada curso es un reto nuevo que yo, al menos, me lo tomo como si acabara de aprobar la oposición, y eso creo que los padres lo notan”.

          Y su tercera faceta como publicista son los libros de etnología, de estos cuenta con otros cuantos, otra decena que completan los veintiséis totales. Como en el caso anterior todos están dedicados a Albacete, diversos aspectos tradicionales, históricos, festivos, patrimonio cultural, etc. de la provincia cuyo interés es siempre el mismo: dar a conocer aspectos de lo que fuimos y de lo que somos, en este sentido destaca los libros monográficos sobre los términos municipales de Paterna del Madera y Alcadozo. A pesar de la seriedad que trasmite, se le nota un rictus de sana alegría, es posible que emoción, cuando habla de los tres últimos, todos ellos saldrán este año: uno dedicado a la Tecnología popular que editará la Diputación a través de Zahora, su revista de tradiciones, otro cuya temática son los Artesanos de Albacete que cuenta con la entrevista y colaboración de cuarenta y cinco artesanos, todos albaceteños, y el más importante, el que lleva por título TIERRA ADENTRO, una obra con casi mil páginas, 1300 fotografías, mapas y planos que conforman dos volúmenes que se presentan dentro de un estuche, en tamaño A-4, con todo lujo de detalles; el primer volumen trata sobre la provincia recogiendo aspectos como la creación, comarcalización, veintiséis rutas alrededor de la provincia y aspectos etnológicos y culturales, y el segundo tomo trata de la capital, la ciudad de Albacete, tanto en su faceta antigua -el desarrollo urbano e histórico de la ciudad- como la ciudad actual, a base de fotografías a color de los edificios más emblemáticos apoyados por textos en prosa y en verso de noventa y cinco autores albaceteños. Oyéndole nos contagia su sentimiento: “Es una obra que viene a ser una radiografía de lo que somos las gentes y los lugares de aquí, en ella he tratado de resumir los aspectos más importantes de los pueblos, su patrimonio cultural, sus fiestas y tradiciones, y también el guiar a los posibles visitantes sobre lo que encontrarán en cada pueblo, los ochenta y siete. Además, el dedicado a la capital. Un trabajo de casi una vida, en el que tengo puestas muchas esperanzas pero que, como todo lo que consideramos importante, me da cierto miedo, esos temores que todos los escritores llevamos dentro, no a hacer el ridículo pero sí a no saber expresar lo que queremos, a no saber llegar al lector y, en este caso, a no cumplir las expectativas que yo mismo me he creado, incluso a que el resultado no sea el apetecido; no obstante es imposible echarle más tiempo, más ganas y más ilusión, ya digo un libro que en cierto modo compendia una vida, la mía, y una tierra”.

          Pero tiene Ángel Ñacle otras facetas que le hacen ser cuanto menos un personaje curioso, en sus años jóvenes, y no tan jóvenes, ha pintado al óleo, trabajado la cerámica y hecho trabajos manuales de cierta enjundia que requieren una buena dosis de paciencia “cuando los críos eran pequeños y se acostaban pronto me dedicaba por las noches a estos trabajos de creación manual tanto de cerámica como labores de estaño, laca de bombillas, madera, barcos, acuarelas, ya ves …”. También escribe de vez en cuando poesías aunque reconoce que no es su fuerte, poemas escritos más con el corazón que con la cabeza; este año ha ganado el Primer premio de prosa sobre El Quijote del prestigiado Certamen Literario del Molino de la Bella Quiteria, en Munera, un trabajo en prosa poética que mereció la unanimidad del jurado; y también este año ha obtenido dos accesit en el Concurso de fotografía convocado por la Diputación provincial, campo este, el de la fotografía, en el que cuenta con una extensísima colección tanto en papel como en diapositivas que alcanza las diez mil instantáneas, un interesante archivo. Un hombre que no sabe estar sin hacer nada porque a su trabajo en el Instituto y a esa buena cantidad de libros suma las colaboraciones en este periódico (y anteriormente en otros diarios, La Tribuna, La Verdad, El Pueblo) y el programa en directo que todos los jueves se emite por la Cadena Ser -Tierra Adentro- en la banda horaria de las 13’30 a las 14 horas, además de otras colaboraciones puntuales para diversos medios.

          Confiesa que ese “asiento de mal culillo” que es le sirve para llenar las tardes libres y los sábados, día dedicado en exclusiva a los viajes por la provincia y alrededores, aunque quizás eche en falta el trabajo en equipo, por ejemplo, una idea que le viene rondando por la cabeza desde hace algún tiempo es elaborar una auténtica enciclopedia donde se pudiesen reunir todos los saberes que sobre la provincia existen, desde todos los ámbitos posibles y del modo más extenso que se pueda, para ello es imprescindible contar con un completo equipo de profesores que desarrollen cada una de las áreas que conformen la obra, labor que llevaría un par de años pero que sin duda merece la pena intentar. Como proyectos de futuro, a partir de septiembre, como todo en Albacete al pasar la Feria, nos habla de un libro en el que ya está inmerso, en colaboración con el naturalista y fotógrafo excepcional Antonio Manzanares, sobre Espacios singulares de Albacete, cuarenta espacios de características fisiográficas especiales. También tiene el encargo por parte del Ayuntamiento de Munera de hacer un libro monográfico sobre esta localidad y finalmente, como producto de paseos por la capital, está elaborando un librito que posiblemente lleve el título de Paseos urbanos por Albacete (o Rutas sentimentales del colesterol) proyecto a medio desarrollar que recorre todos los barrios y algunos parajes periurbanos como El Palo o La Pulgosa.

          En definitiva, un hombre enamorado de Albacete, que lo conoce bien, que disfruta con su trabajo y con sus aficiones y que no duda en participar en todo aquello que quiere: la tierra propia. Es para GENTE un placer contar con su colaboración, en este especial de feria reflejamos parte de su trabajo sobre El desarrollo histórico de Albacete y unas breves líneas sobre los Artesanos de Albacete, reproduciendo literalmente lo que en él se dice de un joven y premiado cuchillero. Que disfruten.

EMILIO MARTÍNEZ para LA TRIBUNA DE ALBACETE

Próximamente, el 21 de septiembre, el conocido profesor Ángel Ñacle (ya jubilado), presentará en Hellín su último libro: PASEOS POR HELLÍN que llega a alcanzar las 600 páginas exactas; por ello, la obra se ha dividido en 2 volúmenes: el primero se fracciona en tres epígrafes generales -Comarca, Municipio, Ciudad- en los que se desgranan muy ampliamente los aspectos físicos y humanos de la comarca Campos de Hellín, de la que la ciudad es capital, del término municipal y de la ciudad, terminando con la propuesta de 6 paseos urbanos por los distintos barrios de Hellín, andando, lógicamente. El segundo volumen queda conformado por 29 rutas a lo largo y ancho del municipio; a través de ellas, el visitante andariego, foráneo o local, podra conocer e interpretar las diferentes zonas en las que Ángel Ñacle ha fraccionado el territorio con el fin de facilitar los recorridos.

 Un libro fundamental que aborda de manera unitaria y tremendamente amplia todo aquello que el lector debe conocer de Hellín en cuanto a geomorfología, relieve, hidrografía, humedales, clima, aspectos vegetales, etc. al tiempo que trata prolijamente aspectos etnológicos que se van desgranando a lo largo de cada uno de las rutas o paseos.

Importante por su complejidad es el repertorio bibliográfico utilizado ya que Ñacle bebe en las fuentes bibliográficas de los siglos XVI a XX de modo que, a través de ellas, nos muestra lo que aquellos autores dijeron sobre la orografía, los ríos, la geología o las producciones agrícolas y mineras del territorio que hoy conforma esta tierra, aludiendo directamente a objetos arqueológicos, lugares de interés histórico y multitud de aspectos. Por ejemplo, Fernando Colón, hijo del descubridor de América, llega a decir que “aquí se hacen las mejores cebollas del pais”. Además, hay varios epígrafes dedicados al Patrimonio de Hellín, Carta Arqueológica, Inmuebles protegidos, Prospecciones arqueológicas, Espacios de especial protección, etc. que vienen a completar lo que llama “Paseos naturalistas, históricos y sentimentales”

ángel Ñacle, andador de Albacete, mantiene viva la llama de la ilusión por nuestra tierra, la publicita y la divulga a través de sus libros, poniendo de relieve esa idea tan suya de que hay que valorar el patrimonio, pero partiendo de una educación del ciudadano que le lleve, primero, a conocer lo que tiene, después a rescatar y conservar lo que sea posible y, finalmente, difundirlo a través del mayor número posible de medios, incluso, en última instancia, denunciando a la opinión pública su expolio o abandono. Como metodología activa para conocer cosas y gentes, lugares, y paisajes, siempre utiliza la investigación y el viaje, y el modo más filosófico y placentero de viajar es andar. El mismo dice en el prólogo “Yo he andado cada uno de los lugares que el lector tiene delante, no sólo para vivir sino para sentir que vivo. El hombre y las estrellas siempre vivieron juntos”.

Esto en lo que respecta a la última obra escrita porque hay más. La Diputación de Albacete publicará en poco tiempo un trabajo de fotografía digital presentado en un pendrive bajo el título de EL LATIR DE UNA TIERRA que consta de 40 carpetas clasificadas temáticamente que contienen 19.000 archivos (19 mil fotos, ha leído bien) que nos presentan Paisajes (clasificados por comarcas), un Mundo rural prácticamente desaparecido (que no volverá), construcciones preindustriales, las aguas en todos sus aspectos, pinturas rupestres, arqueología, monumentos, etnología, fiestas, tradiciones, etc., una relación muy larga y curiosa para exponer aquí. Un trabajo realizado a lo largo de 50 años de recorrer paso a paso la provincia. Genio y figura.

¿Qué razones te llevaron a elegir a Hellín entre otros pueblos? Van a sentir envidia los otros dos ‘grandes’: Almansa y Villarrobledo. ¿O también les tocará?

Desde 2011, que murió mi padre y me jubilé, me vine a vivir a Hellín. Conocía a poca gente, por eso presenté un plan para dar cursos en la Universidad Popular comenzando a impartirlos en 2012, creé la Asociación deportiva y cultural ELO (la antigua ciudad visigoda del Tolmo) haciendo actividades y rutas por la sierra, además, actualmente, soy presidente de MUSSYPHE, Amigos del Museo y del Patrimonio de Hellín. Todo ello ha hecho que esté muy implicado en la vida hellinera, de ahí el libro, una forma de corresponder a tanta gente. 

Eso en el pasado y presente.¿qué proyectos y objetivos tienes a medio o largo plazo? 

Considero que con 38 libros ya publicados he cumplido conmigo mismo y con mi tierra, 40 sería un número redondo. Voy escribiendo poesías, cuentos a mi nieto, microrrelatos, ripios quijotescos, haycus, algunos artículos y ciertas reflexiones sobre la vida y la gente; todo ello conforma un compendio que título Luces y Sombras. Por otro lado, trabajo en darle forma a unas quinientas rutas que ya he hecho por Albacete sin tener muy claro ni el método ni la forma (dejaremos que el tiempo diluya los problemas y me lleve al buen camino. 

Seguro que no te has parado a contar las iles de páginas que tienes escritas sobre la provincia, ¿no? ¿y de fotos?

La cuenta es fácil: 38 libros multiplicado por 160 páginas de media dan unas 6.000 pag.

De fotos, el disco duro del ordenador me dice que 170.000, totalmente clasificadas y ordenadas, ofrecidas a la Diputación de Albacete, destacando el grupo de 70.000 correspondiente al archivo MUNICIPIOS en el que están los 87 pueblos con su patrimonio natural, cultural y etnológico.

Andar… por supuesto he superado los 25.000 km en 40 años

¿De dónde salió tu espíritu ‘aventurero’, ‘andador’, didáctico e historiador? ¿Cómo y cuándo empezaste?

Los primeros años estuve de profesor en Elda, Alicante, allí salía con mis alumnos y al incorporarme a Albacete me dediqué de pleno a la provincia. Mi especialidad en Geografía e Historia me ha ayudado muchísimo en la afición andariega. Además pertenecí (y fui presidente muchos años) del Centro Excursionista de Albacete, también presidí la Federación de Deportes de Montaña de Castilla-La Mancha y formé parte de la dirección de la Federación Española de Montañismo organizando las III Jornadas de Senderismo del Estado Español (el presidente era catalán) por lo que me considero el pionero en lo que a Senderismo federado como deporte se refiere.

¿Pensabas entonces lograr todo lo que has logrado al efecto?

Por supuesto que no. Todo es empezar y, si disfrutas con lo que haces, cada vez quieres más y le dedicas más tiempo.

Lo que no se ha logrado aún, creo yo, pero la que me interesa es tu opinión, es que los albaceteños sepamos valorar y ‘vender’ lo nuestro. Aunque es verdad que el samuguismo nos está abandonando poco a poco.

El pasotismo por las cosas de la tierra sigue ¡ea! El creernos que somos muy poco (ya lo dijo Azorín) sigue ¡ea! El minusvalorarnos sigue ¡ea! pero, sobre todo, es la falta de espíritu y de ganas por conocer la propia tierra y sus posibilidades lo que nos lastra. 

No, no sabemos vender lo nuestro, ahí tienes el ejemplo del vino ¡no se vende vino manchego en casi ningún restaurante de España! Los Ribera de Duero le comen terreno a los Rioja, ese es el camino. Comencemos. 

Supongo que en tal aspecto te darán envidia otros españoles que sí saben valorar y ‘vender’ lo suyo, como, por ejemplo, catalanes, vascos y gallegos.

Yo intento cumplir un objetivo: dar a conocer Albacete. Los demás no me importan. Si creo que las Entidades «pudientes» (sobre todo Bancos y Organismos estatales) podrían hacer más por la provincia.

Añade alguna cuestión que quieras que figure en lo que publique.

Dar las gracias tanto al Ayuntamiento de Hellín como a la Excma. Diputación por hacer posible las dos publicaciones de las que he hablado más arriba. 

Y, la más importante: ¿va a subir el Alba este año?

No creo, pero me gustaría volver a ver al «queso mecánico» en Primera.

EMILIO MARTÍNEZ en LA TRIBUNA DE ALBACETE

Dicen que “no hay mal que por bien no venga” aserto este que es apuntalado por otro, de visión también positivista, que nos dice que “de todo lo malo, siempre, se puede sacar algo bueno” ¿algo bueno de estos dos meses de confinamiento? pues sí, y en este caso afecta directamente a Ángel Ñacle, el naturalista, “el andarín de la provincia por antonomasia”, el escritor, antaño profesor, que vio truncada la presentación de un nuevo libro prevista para el mes anterior, justamente en estas fechas. Efectivamente, el pasado 17 de abril se iba a presentar una trilogía de este prolífico autor en el salón de actos de la Biblioteca del Estado, incluso se hicieron carteles del mismo en el contexto del Día del Libro (23 de abril). Lógicamente el acto se suspendió un mes y pico antes y la obra no se presentó.

          Nuestro hombre, acostumbrado a triscar cerros, se vio, de repente enclaustrado, encarcelado, confinado…, venga usted a decirlo como quiera, y para combatir aquello no se le ocurrió otra cosa que ir repasando, matizando la obra a presentar (por cierto, ya maquetada, pero sin imprimir). Pasaron semanas y el tiempo hizo que los “retoques” se hicieran tan extensos que, finalmente, le decidieron a reconvertir lo escrito en un nuevo libro de tal modo que lo que iba a ser una trilogía se ha convertido en estos dos meses en una cuatrilogía o tetralogía, una obra compuesta de cuatro libros que es un compendio bastante completo que abarca los Aspectos Generales de la provincia de Albacete.

          Preguntado por los contenidos, Ángel es prolijo en explicaciones. En primer lugar aclara que la obra se compone de tres libros en papel y una tarjeta de memoria que contiene exactamente 6.100 imágenes, sí, está bien escrito, 6.100 fotos que abarcan todos los temas imaginables sobre la tierra que nos sustenta: Albacete. Se estructura en 10 carpetas temáticas de entre 500 y 750 fotos cada una (siempre cifras redondas) que, puntualmente, recogen imágenes de los siguientes temas: 1-Paisajes organizados por comarcas, 2-Relieve y montañas, 3-Hidrografía, 4-Flora, 5-Pinturas rupestres, 6-Arqueología, 7-Arte y Monumentos, 8-Iglesias y ermitas, 9-Municipios (miscelánea) y 10-Etnología (1.500 fotos con variados aspectos como son las edificaciones rurales, elementos constructivos, caminos, casas-cueva, cucos, hornos, palomares, fuentes, pozos, aljibes, lavaderos, pilones-abrevadero, acequias, puentes, acueductos, balnearios, zúas, saleros, molinos, almazaras, bodegas, pozos de nieve, instalaciones pre-industriales, calderas, pegueras, carboneras, molinos, castillos, torres, plazas mayores, heráldica, picotas, “mundo rural”, oficios antiguos, atuendo tradicional, usos ancestrales, costumbres, tradiciones, fiestas, danzas, fuego, cruces, Santos, etc.), imágenes a lo largo y ancho de toda la provincia; como él mismo dice “buenas, malas y regulares fotos” pero que tienen el valor del conjunto y del paso del tiempo, además, muchas, de lugares muy desconocidos por lo alejados de la carretera. Un modo de hacer presente cosas, lugares y gentes -que también las hay- de todas las partes del mapa provincial.

          Los tres libros, en papel, claro, son PAISAJE Y RUTA. PASEOS NATURALISTAS POR ESPACIOS SINGULARES DE ALBACETE, de 430 páginas, compuesto por 33 rutas a pie, etnográficas, estructuradas por las diferentes comarcas que, partiendo de la zona del río Cabriel, en Villamalea, van dando la vuelta pasando por todas y cada una de ellas, rutas o paseos para recorrer y reconocer un mundo primigenio que se va, irremisiblemente. Los contenidos del segundo libro -TIERRA DIVERSA. MEDIO NATURAL, HISTORIA Y ARTE DE LA PROVINCIA DE ALBACETE- quedan claros en el propio título, 330 páginas en las que se abordan en el Capítulo I los aspectos fisiográficos, relieve, hidrografía, carstificación, flora, fauna y Espacios Naturales protegidos; en el Capítulo II, la Historia, subdividida en 13 Epígrafes, desde la Prehistoria hasta el siglo XX; y, finalmente el Arte, en el que se recogen, agrupados por Estilos artísticos, los diferentes monumentos y construcciones más sencillas con las que contamos, no profundizando sino relacionando. El tercer y último libro, el “parido en el confinamiento” lleva por título IDENTIDAD. TRADICIONES, FIESTAS Y MUNICIPIOS DE LA PROVINCIA DE ALBACETE, título que también deja claro cúal es el objetivo del mismo, que no es otro que prestar atención a los Municipios de manera individualizada, uno por uno, señalando en cada uno de ellos algunos datos como habitantes, superficie, altitud, ermita, romería, tradiciones, Iglesia parroquial, monumentos, arqueología, ecología, lugares de Interés o BIC, naturalmente de un modo resumido; otras 180 páginas que junto a las anteriores suman más de 900, exponentes resumidos del Patrimonio provincial; ello junto a las 6.100 fotos, lo que sin duda, más o menos acertadamente -que eso está por ver-, nos permite acercarnos de un modo ciertamente íntimo al acervo cultural, histórico, natural, etnológico con que contamos, al que podemos acceder compendiado en esta tetralogía que, para más detalle, se presentará recogida en un estuche-contenedor.

          Cada uno de los tres libros esta prologado por el autor, prólogos en los que deja bien claros tanto sus planteamientos respecto al patrimonio como lo que debería hacerse para darlo a conocer partiendo de una premisa lógica: estudiarlo, conocerlo, recuperarlo y difundirlo, algo que los albaceteños no siempre cumplimos ya que, bajo su opinión, somos poco dados a conocer y menos aún a divulgar lo que tenemos. Nos apocamos creyendo que no tenemos nada o que no merece la pena.

          Hace ya casi dos años, la obra recibió el apoyo incondicional de la Asociación Cultural Albacete en Madrid, sede en la que Ángel Ñacle impartió hasta tres conferencias-coloquio y recibió el galardón de Albaceteño Distinguido, por ello cada uno de los tres libros contiene un Prefacio de miembros de esta Asociación: Emilio Martínez (quien esto escribe), periodista, ha hecho el del primer volumen, Patricio Morcillo y Augusto Huéscar, Presidente y Secretario respectivamente de la Asociación, se han encargado del segundo, y Javier López Galiacho, Presidente de AMITE, el del tercero. Al fin y al cabo, los albaceteños en la diáspora hemos querido poner de manifiesto nuestro apoyo a esta obra que, pensamos, no pretende otra cosa que ser un altavoz escrito de lo que a través de los siglos y milenios nuestra tierra es.

          Este hombre, Ángel, es que no para, con este serán ya 35 los libros escritos sobre Albacete, los de andar y senderismo son los más conocidos, quizás porque fue pionero en tamaña empresa, pero también los hay de Historia, de Etnología, de algunos pueblos (Alcadozo, Hellín, Paterna del Madera), de Comarcas (La Sierra de Segura), incluso de poesía. Preguntado por trabajos de futuro, ahora se descuelga con que está preparando una exposición de cuadros ¿el qué? sí, cuadros responde tranquilamente, desde siempre he pintado y como con esta obra de la que hablamos daré por concluida mi etapa literaria, si se puede llamar así, ya hace un par de años que comencé a hacer pinturas, principalmente en acrílico y acuarela, cuya temática son paisajes. Ahora pretendo sistematizarlo y, juntando lo ya hecho (unos cincuenta cuadritos) y lo próximo preparar una muestra digna que muestre pictóricamente aspectos de pueblos y lugares de la provincia. Una aventura, sin duda. Otra posible actividad es la colaboración con este diario, La Tribuna, semanalmente, sobre alguno de los aspectos comentados anteriormente, algo relacionado con el patrimonio cultural o medioambiental; eso está en manos del periódico. Otro objetivo, entretenimiento más bien, puede ser el volver a fotografiar más detenidamente lugares, gentes o actividades singulares perdidas en el tiempo para que queden plasmadas para siempre en la memoria colectiva; se trata de volver, andando, a lugares perdidos y abandonados que ya conozco para, con la tranquilidad y sosiego de los años y sin la prisa de la caminata, fotografiar de nuevo rincones únicos que muy pocas personas conocen porque se ubican en lo más profundo del medio rural (llano o sierra), abandonados y olvidados por todos, incluso sus nombres han desaparecido de los nuevos mapas catastrales. También a personas mayores, viejos, que queden vivos de aquellos que conocí hace veinte, treinta o más años.

          Una obra magna, aunque esta no la haré yo, desde luego, pero aprovecho la ocasión para  decirlo, sería hacer un DICCIONARIO DE TOPÓNIMOS DE LA PROVINCIA DE ALBACETE, miles de lugares, cortijadas, rincones, accidentes geográficos, plantas, espacios naturales, que tienen su nombre vernáculo (muchos cientos de ellos ya desaparecidos, como decía) pero también tienen su nombre local, aquel con el que se conocen, desde una piedra a un collado, de un árbol a un paraje, de una hierba a una herramienta, es tan interesante el tema que llevaría mucho tiempo su sistematización, localización, significado semántico, contexto, etc. una labor muy interesante que, en cierto modo ya aparece someramente en mis libros de andar, pero que requeriría de la óptica y el rigor académicos, por ejemplo, de una tesis doctoral. Bueno, ahí queda eso, si alguien se anima contaría con mi ayuda y con mi archivo, gráfico y escrito, en el que hay una buena colección de lo andado estos 40 años, cosas que nunca han visto la luz.

          Finalmente le preguntamos sobre la cuestión de la presentación de la obra. Aquí, Ángel Ñacle, vitalista y animoso, duda; casi podríamos decir aquello de “no sabe, no contesta”. La tarjeta de memoria y el primer libro, el de rutas, están terminados, los otros dos se están maquetando nuevamente y, si es posible, podrían imprimirse en junio, lo mismo que el estuche, a todo color y muy atractivo, de tal modo que en el verano estaría, hipotéticamente, listo, pagado y a disposición. ¿La presentación?  cuando se pueda, quizás en octubre, habrá que esperar porque ahora todo es una incertidumbre. Se harán solamente 250 ejemplares, la mitad de ellos el estuche con la obra completa y los otros 125 se podrán comprar por separado, libro a libro, en función de lo que a cada cuál le interese, aunque el valor intrínseco es el de la obra completa, esas casi mil páginas-resumen de Albacete y las 6.100 fotos consiguientes.

          Un placer Ángel, como nos dice al despedirse “El hombre y las estrellas siempre vivieron juntos”. Y algo de verdad habrá en ello cuando ha luchado tanto por esta tierra.     

EMILIO MARTÍNEZ en DIARIO CRÍTICO DE CASTILLA-LA MANCHA

Sábado 25 de noviembre de 2017

‘YESTE, PARAÍSO natural’, nuevo libro del profesor, montañero y naturalista Ángel Ñacle

> Con 33 rutas a pie para recorrer esta bella localidad albaceteña y conocerla en toda su extensión

En Yeste, y dentro del extraordinario marco de la Feria de Tradiciones, Ángel Ñacle García presentaba un libro monográfico de la histórica villa, libro compuesto de una primera parte sobre el patrimonio natural e histórico artístico del municipio y una segunda formada de 33 rutas a pie para recorrerlo y conocerlo en toda su extensión, por sus cuatro puntos cardinales.

Ángel Ñacle se considera, por este orden, profesor, montañero y naturalista. También la etnología está muy presente en su obra. De Albacete, por supuesto. De su labor como profesor de Geografía e Historia ya está jubilado de Universidad e Instituto pero ese “gusanillo” de impartir docencia tiene su hueco en la Universidad Popular de Hellín donde imparte cursos sobre el Medio Natural albaceteño y Patrimonio e Historia de Albacete, labor gratuita que tiene su recompensa en la difusión de lo albacetense y en las relaciones de amistad que ello conlleva.

De montañero, en cambio, es algo de lo que no se jubila, a sus 66 años recién cumplidos sigue triscando cerros (como él mismo dice), recorriendo paso a paso cada uno de los montes que se le ponen por delante. Naturalista (que no ecologista obligatoriamente) lo es por vocación desde joven y “por uso y disfrute de la naturaleza” al ser éste el medio que necesita para desarrollar las actividades montañeras y senderistas. Del mismo modo, al andar tantos lugares y tomar contacto con tan diversos medios y lugares de asentamiento es imposible no contagiarse de las costumbres y usos locales añadiendo notas etnológicas y costumbristas a ese conocimiento global de la provincia.

ESTA ES LA ENTREVISTA PARA DIARIO CRÍTICO

 Después de más de una treintena de libros publicados ¿por qué solamente Albacete?

Los albaceteños, al menos los de antes, hace unas décadas, eran (o somos) demasiado humildes, a veces retraídos, y poco dados a dar a conocer nuestros valores, los que tenemos, sean muchos o pocos, incluso en algunos casos a sentir cierta “poquedad” de ser manchegos y albacetenses. A mí me dio la vena reivindicativa de lo albaceteño muy pronto y decidí conocer, estudiar y dar a conocer lugares y cosas de la provincia, es decir, desde los veinte y pocos años asumí una labor de divulgar a los cuatro vientos la tierra que me vio nacer, que es una tierra como cualquier otra pero que había que promocionar en la medida de lo posible. Y así lo he hecho hasta ahora.

¿De ahí esa producción como escritor local?

Efectivamente, comencé haciendo mi Memoria de Licenciatura sobre la Creación de la provincia de Albacete y los Proyectos de División Territorial (1785-1833), hice también la Tesis Doctoral sobre la Instrucción Primaria del siglo XIX en la ciudad de Albacete y, al mismo tiempo, comencé a recorrer la provincia andando, me integré en el único Club de montaña que entonces aquí había, el Centro Excursionista de Albacete, del que fue Presidente una década y más tarde Presidente de la Federación de Montaña de Castilla La Mancha, y de este modo fui conociendo todos los rincones de mi tierra; así nacieron una docena justa de libros de senderismo y rutas montañeras a lo largo de casi una vida.

¿La facete de naturalista?

Como es lógico al pasar tanto tiempo inmerso en la naturaleza es lógico que se despierte el espíritu naturalista que todos llevamos dentro, el aprecio por el medio natural y su conservación aunque yo me considero más bien ecólogo, conocedor y estudioso del medio que nos rodea y nos da cobertura, que exclusivo ecologista y conservacionista, faceta más reivindicativa, de modo que he orientado mi actividad a estudiarlo desde el punto de vista geográfico aunque es evidente que también he luchado por conservar y proteger, pero en segundo plano.

¿Y la Etnología?

Si como naturalista prima mi formación profesional en Geografía, en lo concerniente a Etnología lo hace la Historia. Es producto de lo mismo, al ser profesor de estas materias no me he limitado solamente a andar, subir, ver, disfrutar…de aquellos lugares por donde transcurren las rutas, o las ascensiones, sino que al pasar o llegar a cortijos, aldeas o pueblos me interesan sobremanera sus costumbres, usos, fiestas, tradiciones, vocabulario…y, por supuesto su Historia, teniendo contacto directo, hablando, con las gentes y tomando nota de su sabiduría. He escrito varios libros monográficos de pueblos como Alcadozo, Paterna del Madera, la propia capital, Albacete, Hellín y, ahora Yeste, además otros dos de la Sierra de Segura y la Sierra de Alcaraz sobre el tema. Precisamente la Diputación, a través de la Revista Zahora, de Tradiciones, tiene ya preparada mi publicación sobre Aspectos Etnológicos de la provincia de Albacete; en total otra docena completa de publicaciones de temática etnográfica.

¿Hablabas de conocimiento global de la provincia?

Es una forma de expresión; pretendo dar a entender que conociendo lo que suelo llamar el Medio Natural y el Medio Social, es decir, los aspectos geográficos, históricos, etnográficos y del patrimonio, podemos llegar a tener una idea muy exacta y cercana de cada uno de los lugares que forman la provincia y, por ende, la globalidad de lo que es Albacete, nuestra tierra (por cierto, título de un libro que me publicó Globalcaja en 2011).

Nos queda hablar de la actualidad y del futuro

La actualidad “más caliente” está cercana, fue el 20 de octubre, en Yeste, donde en el recoleto claustro del Convento de Franciscanos se presentó “YESTE, PARAISO NATURAL”, un libro monográfico de esta preciosa villa y su término municipal ya que, a través de 33 rutas, recorro todo el término con la intención de divulgar sus bellezas, topónimos y lugares. Es una guía senderista de 290 páginas y otras tantas fotografías.

¿Qué otros libros preparas o van a salir con tu prestigiosa firma?

Próximamente (ya he citado) saldrá el volumen que editará la Excma. Diputación sobre Aspectos etnológicos de la provincia. Y, finalmente, quisiera publicar algo que tengo ya terminado hace un par de años y que puede considerarse el fin de mi trayectoria como escritor local: son dos volúmenes que podrían formar un conjunto, uno titulado PAISAJE Y RUTA, que son paseos naturalistas por espacios singulares de la provincia (375 pp.) y otro titulado ALBACETE TIERRA DIVERSA que es un epítome, una sinopsis, de Geografía, Historia y Arte de Albacete (325 pp.) con el objetivo final de tener una visión global. Espero que la Diputación o alguna entidad bancaria puedan abordar su publicación. Al tiempo, me dedico a seleccionar y organizar los casi cien mil archivos fotográficos que tengo, que forman un patrimonio muy rico después de cuarenta años pateando esos caminos, fotografías singulares y únicas muchas de ellas tanto por su antigüedad como por su casuística (por ejemplo, por citar alguna, la colección de las ascensiones a los vértices geodésicos de las montañas más altas). Sería una pena que al desaparecer yo desaparezcan estos 100.000 testimonios de una forma de vida rural que está a punto de desaparecer, una vida primigenia de trochas, caminos, cortijos, costumbres, lugares y topónimos que ya no están ni en los mapas del catastro, literalmente. Yo los cedería, pero alguna entidad u organismo tendría que recepcionarlos y darles un uso digno porque forman un acervo único en la provincia.

Como suelo decir “Más vale llenar los años de vida que la vida de años”.

BOLETÍN DE LA ASOCIACIÓN CULTURAL ALBACETE EN MADRID

Ángel Ñacle García es profesor y andarín. De Albacete. De estas tres premisas ha hecho una forma de vida, un estar en el universo cotidiano cuyo objetivo claro y diáfano es el conocimiento y difusión de lo albacetense, tarea ésta a la que ha dedicado los 31 libros publicados en la actualidad.

Para completar esa actividad literaria, en la actualidad ha terminado una obra de años, de muchos años, una trilogía compuesta por dos volúmenes escritos y un tercero de fotografías en formato DVD. El primer libro, titulado PAISAJE Y RUTA, son paseos naturalistas por espacios singulares de la provincia, un libro de viaje y de andar, 32 rutas por todas y cada una de las comarcas, mostrando los valores naturales de aquellos espacios, lo que, prioritariamente, debería mostrarse a la gente. El segundo libro es TIERRA DIVERSA, construido como un epítome, una sinopsis de la Geografía, Historia, Arte y Etnología de la provincia con la finalidad de ofrecer una visión global de la misma de un modo breve y claro. Finalmente, el libro-DVD titulado “IDENTIDAD. LA PROVINCIA DE ALBACETE A TRAVÉS DE SUS PAISAJES, SUS COSAS Y SUS GENTES” está compuesto, como decía, por 4.200 imágenes seleccionadas entre más de 100.000 archivos, un modo gráfico de ver, para conocer, multitud de aspectos identitarios de nuestra tierra albaceteña.

BOLETÍN DE LA ASOCIACIÓN CULTURAL ALBACETE EN MADRID

Domingo día 19. A las 12,30h en el Salón de Actos. La A.C. Albacete en Madrid. Presentación de la conferencia “Doscientos años de la provincia albacetense” por Ángel Ñacle García. Que nos visita nuevamente para darnos noticias fresquitas sobre muchos aspectos de las tierras y la vida en las tierras albaceteñas. Con cerca de 40 títulos de su mano y un estudio palmo a palmo del territorio provincial, documentado con muchísimos miles de fotografías, Ángel Ñacle es hoy por hoy “el cronista de la provincia” por iniciativa propia.

Bienvenida sea siempre su actividad y su entrega, en este momento con una dedicación especial a Hellín, donde se asentó tras su jubilación como docente hace poco más de una década. Aprovecharemos para presentar su libro de reciente distribución “Paseos por Hellin”

CONFERENCIA DE MIGUEL PANADERO MOYA

PRESENTACIÓN DEL LIBRO “ALBACETE. NUESTRA TIERRA”

14 de septiembre de 2010, feria de Albacete

          Buenos días, en primer lugar, quiero saludar a todos ustedes que han tenido la amabilidad de venir esta mañana aquí a asistir a esta presentación que la Caja Rural ha presentado tan bien, además de la presentación del libro, introducida por una conferencia con el título de Disfrutar del Paisaje.

          Pero entenderán ustedes que ni el día ni el lugar estaría bien que yo me extendiera demasiado en hablar en el tono y en las circunstancias que requerirían dar una conferencia sobre disfrutar del paisaje, así que no teman, que no van a asistir ustedes a una conferencia, si no ha solamente a algunas reflexiones sobre el paisaje que es un tema de gran actualidad en la política y en la administración y que la oportunidad de la presentación del libro de Ángel Ñacle nos permite hacerlo.

          Quiero saludar también a las personas que están conmigo en la mesa, a mi compañero y amigo decano de la Facultad de Humanidades de Albacete, Don Francisco Cebrián Abellán, que desde la Universidad está dirigiendo proyectos y trabajos orientados en la línea en la que este libro de Ángel Ñacle actúa, se nos presenta. Por supuesto al Concejal representante del Ayuntamiento de Albacete, Ramón Sotos, con quien coincidimos muchas veces, en preocupaciones sobre una cuestión que tiene que ver con el paisaje que es su discurso, que es mi discurso en muchas ocasiones, sobre el principio y la aplicación de la Sostenibilidad, así que nos hemos encontrado en el camino de la Sostenibilidad muchas veces. Por supuesto al presidente de la Fundación y de la Caja Rural, también antiguo y viejo amigo, Higinio, compañero de labores profesionales muchas veces y hoy aquí con la responsabilidad y el honor de presidir este acto y finalmente a Ángel Ñacle, una persona a la que me unen unos lazos de amistad muy lejanos.

          Mi conocimiento de Ángel Ñacle, se retrotrae, pues, a más de 40 años. En esos años él era alumno mío y yo era profesor suyo en la escuela de Magisterio y siempre existe, como ustedes saben, y él lo ha podido experimentar también, una relación de afecto, de maestro a discípulo, siempre ha existido y se nota. Los padres aprenden de los hijos y los hijos aprender de los padres; y los maestros enseñan a los discípulos y aprenden de sus discípulos. Y yo tengo la suerte, después de haber podido explicar Geografía en la escuela de Magisterio, encontrarme a lo largo de la vida, la trayectoria de Ángel Ñacle, viejo alumno mío, ejercitándose en esta función y haciéndolo excelentemente, de una forma apasionada. Ya saben ustedes lo que significa la pasión, una afición vehemente, ardiente, impetuosa, fuerte, muchas veces eficaz, y eso yo creo que es la característica principal de Ángel Ñacle cuando se pone a estudiar y de sus estudios los transmite a través de su escritura y después a través de sus publicaciones con las cuales nos entretiene, nos anima y nos ayuda a comprender mejor lo que él ha estudiado y los conocimientos de la provincia de Albacete, que la tiene pateada, sin que quede ni siquiera un centímetro de su suelo en el que él no haya puesto la suela de sus zapatos.

          Bien, así que debo de hablar de “Disfrutar del paisaje”, en torno a esta oportunidad de la publicación de un libro, un libro interesante, un gran libro, un libro necesario y oportuno en esta ocasión que es este libro: “Albacete, nuestra tierra”. Es un libro fundamentalmente de imágenes y de mensajes literarios, sobre todo de imágenes, a través de las cuales se acompaña, y el acompañamiento de esos mensajes escritos se puede comprender muy bien, se pueden revivir esas experiencias personales del conocimiento de nuestra tierra, de la vivencia de nuestra tierra. Y les decía que quiero hablarles de Disfrutar del paisaje, les parecerá un título, no sé si sugerente, desde luego no es un título mío, he de reconocer que el titulo me lo ha prestado Ángel Ñacle, porque después de la Introducción, de la entrañable Introducción que Higinio pone en las primeras páginas del libro, en la página siguiente aparece un hermosa fotografía, es un espectacular paisaje de una montaña albacetense, inaccesible para cualquiera que no pueda seguir el paso decidido de nuestro incansable autor y a lo largo de esa imagen, hermosa y frágil fotografía, a una frase introductoria que es una declaración de principios y a su vez una proclamación de un programa personal del autor. Dice: ‘’Disfrutar del paisaje, estudiarlo y conservarlo, defenderlo y amarlo, es una experiencia vital que hace grande al alma humana’’ Es un pensamiento, es su programa de existencia y el libro lo transmite de esa manera. Yo les decía que el libro es un libro apasionado, que transmite el sentimiento y la personalidad del autor, y es al mismo tiempo un libro oportuno y les diré porque es un libro necesario y apasionado, en el que se presenta el paisaje y se presenta como un objeto estético y como un protagonista de la historia. Ustedes ya saben que a lo largo del tiempo ha existido una tradición paisajística que se nos ha transmitido a través de la pintura, sobre todo, desde el siglo XVI al s. XX a través de los distintos estilos artísticos de la historia del arte. El paisaje ha estado presente en primer lugar en la pintura, desde los paisajistas holandeses del s. XVI hasta Benjamín Palencia, por ejemplo, por decir algún autor de nuestro tiempo en el que el paisaje ha sido el elemento principal de su obra. También, en el s. XX el paisaje está presente sobre todo dentro de las Bellas Artes, además de en la pintura, en la fotografía o en la arcilla, nos quedamos exhaustos ante las fotografías de muchos de nuestros paisanos y también de otros autores internacionales, de todo hay en todas partes, relacionados con la fotografía, por una parte, aquí hay fotógrafos excelentes, o también si quieren ustedes esas imágenes que muchas veces nos ofrecen las pantallas de cine. Ahí está presente el paisaje. Y el paisaje está presente además de en todos estos sitios en nuestra realidad cotidiana y en nuestra experiencia personal porque el paisaje está en la realidad de las cosas, pero no solo está ahí, el paisaje solamente existe cuando se estable una relación entre quien observa y el medio entorno observado, es esa relación la que define el paisaje. Si no hay una persona que perfile y que siente, como persona dotada de inteligencia y de experimentar no hay posibilidad de experimentar placer y poder elaborar juicios estéticos, de tal manera que el paisaje es finalmente un objeto abstracto. No es esa cosa que vemos, si no lo que nosotros internamente sentimos al observar esa cuestión. Naturalmente necesitamos un elemento material, algún soporte que nos provoque ese sentimiento estético que nos permita distinguir y sentir la belleza de las cosas, y es en primer lugar la naturaleza que nos rodea, el medio que nos rodea. Pero el medio que nos rodea no es solo la naturaleza, es la naturaleza impregnada, revestida, transformada por la presencia de los hombres a lo largo del tiempo. Y cada paisaje lo que transmite es el sentimiento de la naturaleza y de las acciones humanas sobre la naturaleza. Naturalmente muchas veces, las acciones humanas han perturbado, deshecho, destruido lo que la naturaleza por su propia inercia nos ha podido mostrar. Y finalmente, como hemos descubierto el resultado de todo esto es que es necesario hablar del paisaje y esa necesidad de hablar del paisaje transciende del sentimiento personal a las organizaciones sociales y de las organizaciones sociales a los niveles más elevados.

          En los últimos años a nivel europeo en el Consejo de Europa que, como saben ustedes, reúne no solo a representantes de los países de la Comunidad europea, si no de muchos países diferentes, en el Consejo de Europa, acordaron convenir, escribir, el “Convenio Europeo del Paisaje”. Este convenio se ha convertido en un instrumento con grandes repercusiones, porque firmado por los representantes de los países del Consejo Europeo, su tipo de planteamiento, pidieron a sus propios gobernantes que tomarán medidas, escribieron un documento en el que definían lo que entendían que era el paisaje marcando una serie de directrices haciendo ver que el paisaje, una vez establecido ese activas, positivas, para establecer que el paisaje, el entendimiento, la percepción del paisaje, entrase en las medidas de las políticas activas  de ordenación del territorio por  cada uno de los países. De tal manera, que por motivo de esta ocasión una vez que el convenio estuvo discutido en cada uno de los Parlamentos de los estados miembros y finalmente aprobado en el Congreso de los Diputados, se pasa al Jefe del Estado, para que lo ratifique y lo publique en el Boletín Oficial del Estado, esta ratificación se produjo en el año 2007, la publicación en el BOE se produjo en Febrero del año 2008 y desde ese momento, España se ha comprometido a tomar medidas de protección del paisaje lo que supone poner en marcha iniciativas para formar especialistas en el reconocimiento y en la gestión de los paisajes, al mismo tiempo establecer medidas de clasificación tipológica de los paisajes que se pueden identificar en cada uno de los países, o en cada uno de los lugares y a continuación poner en marcha medidas legales que obliguen a quienes tienen que llevar a cabo los planes de organización urbana, territorial incorporar determinaciones concretas y expresas para que no puedan producirse agresiones al paisaje como habitualmente estamos familiarizados con su existencia. Para que cuando veamos un paisaje, por ejemplo, el castillo de Chinchilla desde Albacete, la vista no nos oculte la gran cantidad de tendidos eléctricos, de torres de electricidad o de carteles anunciadores de empresas o de productos; todas ellas son necesarias para el funcionamiento económico de la sociedad, pero todas ellas tienen que actuar respetuosamente con el paisaje. Tantas veces los que estamos aficionados a hacer fotografías salimos a la calle y nos encontramos, a lado del mejor de los edificios, del más bello de los edificios. Yo creo que en algún momento tenemos que tener en cuenta que ambas cosas son necesarias, pero que ambas cosas tienen su lugar y es perfectamente necesario tener lugares de contenedores de basura, pero es también absolutamente necesario que los responsables de la administración determinen los lugares para proteger aquellos objetos artísticos que enriquecen el paisaje. Bueno no quiero decirles nada de los cables de la luz a la vez que qué queremos sacar la imagen de una torre o de una iglesia, todo ese tipo de cosas son las que han motivado al Consejo de Europa, a establecer una convección para que a partir de ahora haya una serie de medidas que se introduzcan en la administración pública y permitan que todos gocemos y defendamos el paisaje como un bien que introduce objetivos. En cualquier caso, les diré que aprobado el convenio del paisaje todos los Estados se vieron obligados a cumplir esas determinaciones. En el caso del Estado Español que es un Estado, como saben ustedes, con competencias descentralizadas en ordenación del territorio y las administraciones regionales en las Comunidades Autónomas, cada una de las comunidades autónomas han empezado la tarea de promulgar su propia Ley Regional del Paisaje. Algunas Comunidades Autónomas ya la tienen hecha, existe en la Comunidad Valenciana, existe en varias comunidades, y en este caso la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha a través de la Consejería de Ordenación del Territorio ha iniciado también los pasos necesarios para poder establecer una Ley del Paisaje.

          Establecer una Ley del Paisaje requiere en primer lugar un inventario de los paisajes de la región, y he de decirles que el inventario de los paisajes de la región de Castilla- La Mancha se ha estado haciendo durante el año 2009 y los meses pasados del año 2010 y como ya nos ha transmitido algunas veces la Directora General  de Ordenación del Territorio, y ha hecho público, no hago más que transmitir una noticia que ya está en la prensa y en todas partes, se ha preparado la edición de un libro que se titulará ‘ Atlas de los paisajes de Castilla la Mancha’’ es muy probable que este libro, podamos disfrutar de él, en navidades, más o menos, pero el libro de Ángel Ñacle, que es muy oportuno, porque es como precursor sobre lo que después tendremos sobre la mano, así que es una oportunidad excelente en la que la Caja Rural, patrocina este libro escrito por Ángel Ñacle, en este momento en el que en toda Europa, en España, en todas las Comunidades Autónomas y en nuestra Comunidad Autónoma se está trabajando precisamente en esta dirección de la protección del paisaje.

          Bueno aquí he terminado, no quiero entretenerme más ni molestaros más con esto, que ya empezaría a parecerse a una conferencia, que de ninguna manera que sea. Muchas gracias a todos ustedes por su atención. Yo creo que para terminar debemos felicitarnos por poder contar con un nuevo libro que nos permite compartir la pasión del autor, por nuestra tierra y por nuestros paisajes. Felicito a la Caja Rural por la defensa de reconocimiento de la identidad de nuestra tierra albacetense, expresada aquí mediante su contribución a la elaboración de este hermoso libro de Ángel Ñacle. Y al autor naturalmente por darnos la oportunidad de compartir con él, el amor que siente y manifiesta por Albacete y no puedo dejar de invitarle a que no ceje en su afán de búsqueda y de organización y de testimonios literarios y de imágenes gráficas de esta tierra a la que los himnos y los poemas llamas bendita, noble, sencilla y que a muchos de nosotros nos vio nacer y que a todos nos acoge y a la que, cuanto mejor conocemos, y que con este libro podemos conocerla mejor, con mayores razones podemos expresarle nuestro afecto. Muchas gracias.

“EL LATIR DE UNA TIERRA”.

LEGADO FOTOGRÁFICO DE ÁNGEL ÑACLE GARCÍA

Sobre el proyecto

Surge del objetivo de poner a disposición de la ciudadanía un trabajo de investigación visual de toda la provincia de Albacete, que recoge exactamente 16.000 fotografías clasificadas y estructuradas en cinco secciones principales con las que se pretende dar una visión de la riqueza y las peculiaridades de esta provincia.

Ángel Ñacle García ha dedicado una gran parte de su vida, a crear todo este legado para que quede constancia en el futuro de lo que una vez existió en la tierra que nos vio nacer.

La Diputación Provincial de Albacete ha querido compilar todo este legado en un pendrive que permita navegar por todo su contenido a cualquier persona que tenga curiosidad por conocer más sobre la Provincia de Albacete. Aceptando la cesión del contenido, propiedad intelectual de Ángel Ñacle García que ha realizado un minucioso y excelente trabajo de investigación fotográfica durante muchos años recogiendo e inventariando desde el medio natural e histórico-cultural en el que vivimos hasta los aspectos etnológicos, costumbres y tradiciones, que nos caracterizan, pasando por ese mundo rural primigenio que, prácticamente, ha desaparecido y que definió durante toda su historia a los pueblos manchegos y serranos de la provincia.

Un trabajo singular basado, no en su calidad fotográfica, sino en la forma de compendiar lo fotografiado a través de los años, estructurado en cinco grandes grupos temáticos: “Paisajes, una tierra de contrastes”, “Memoria de un mundo rural que no volverá”, “El marco natural”, “La vi da social” y “Antropología, fiestas y tradiciones”.

EXCMO. AYUNTAMIENTO DE LA CIUDAD DE HELLÍN en el SALUDA para mi libro en dos volúmenes “PASEOS POR HELLÍN”

Publicado por el Ayuntamiento de Hellín, este libro es un llamado a todos los amantes del senderismo y aquellos que deseen conocer más sobre tierra.

Ángel Ñacle nos invita a descubrir nuestro municipio y nuestra comarca a través de las páginas de este apasionante libro de senderismo y cultura local. Impreso en dos volúmenes cuidadosamente diseñados, con infinidad de fotografías, el autor nos acompaña en un intenso viaje por los territorios que conforman nuestro paisaje

…

Agradecemos al autor, que sea tan apasionado “excursionólogo” albaceteño por su dedicación en dar a conocer nuestra tierra y por capturar su esencia, por mostrar lo que somos a comienzos del siglo XXI y por aunar deporte, cultura y ocio. 

EMILIO MARTÍNEZ en LA TRIBUNA DE ALBACETE, septiembre 2024

¿Cómo se te ocurrió la idea? 

A lo largo de cuarenta años -en mis rutas- he ido haciendo fotografías de todos los pueblos de la provincia, como suelo decir, malas, regulares y algunas buenas porque son fotos hechas con la mochila a cuestas, siempre andando, lo que implica cámaras compactas de poca calidad y escasos segundos para hacerlas. Tenía 192.000 fotos muy bien clasificadas por municipios y en la pandemia (algo bueno tuvo) decidí hacer con ellas un archivo que llamé «ALBACETE TEMÁTICO». Como su nombre indica, clasifiqué las fotos por temas y obtuve 60 carpetas con las fotos agrupadas por su temática, por ejemplo, relieve, ríos, humedales, mundo rural, casa-cueva, caminos de herradura, lavaderos, manantiales, hornos, cucos y chozos, bodegas, almazaras, pinturas rupestres, monumentos y arte, castillos y atalayas, heráldica, ermitas, fiestas, tradiciones, oficios, etc, etc, hasta 60 carpetas, como digo. Una variadísima y completa panorámica de todos los aspectos que puedas pensar, siempre limitado a la provincia de Albacete. De todas ellas seleccioné 25.000 fotos que ofrecí a la Diputación, gratuitamente, como es natural, que aceptaron. Finalmente, por funcionalidad, se quedaron en 16.000, es decir, sólo un 8 por ciento del total, que, bajo el nombre de LEGADO FOTOGRÁFICO, ha publicado en forma de pendrive dentro de un coqueto estuche de madera. Muy bonito.

No obstante, mi intención e interés es que se pueda publicar la colección POR PUEBLOS, de manera que haya 87 carpetas -una por localidad- en donde los ciudadanos puedan ir directamente a su pueblo y ver qué cosas hay. En este caso también hice una selección de 75.000 fotos que están en espera de ver la luz por parte de alguna institución o entidad. Por mi parte siempre será gratuito, pero soy consciente de las dificultades que entraña una publicación tan amplia. Quizás la Fundación de Globalcaja -por su implantación en el medio rural- sería un buen candidato para ello.

Supongo que con el tiempo puede haber una segunda edición con más fotos, ¿no?

Se han hecho solo 100 pendrives con su estuche por lo que tiene escaso recorrido y, además, como es lógico, no se pondrán a la venta. Personalmente pienso que de cara al futuro se podría sustituir el estuche de madera por un cuadernillo con explicaciones que complemente las imágenes. Sería más económico y el aporte explicativo lo hace más interesante. Su precio no tendría por qué sobrepasar los 10 € por lo que los ciudadanos tendrían algo barato y muy interesante. Desde este medio hago el ofrecimiento a cualquier librería o empresa que quiera publicarlo, evidentemente, si es particular, con su publicidad más prudente.

¿Sabes si hay algo similar en alguna otra provincia?

No tengo conocimiento de ello. Creo que es único, como es único el que un ciudadano haya recorrido más de 25000 km andando toda la provincia, de Caudete a Villarrobledo y de Villalgordo del Júcar a Nerpio, pero nadie «es profeta en su tierra», eso lo tengo asumido desde hace mucho tiempo. También he de decir que esto no es queja, yo he disfrutado y disfruto a mis 72 años recorriendo nuestra tierra. La lástima es que un legado así se pierda porque, como dijera el Rey Sol «después de mí, el diluvio».

¿Cuándo empezaste a hacer fotos?

De manera sistemática hace 40 años, cuando vine definitivo a mi plaza de profesor en Albacete capital.

¿Cómo y por qué te dio esta bendita locura de machacarte palmo a palmo, y no exagero, la provincia? ¿Y de estudiar todas sus características para reflejarlas en tus cerca de 30 libros?

Te corrijo, no son 30, son 38 las publicaciones que tengo, por cierto todas agotadas. La penúltima una TETRALOGÍA DE ALBACETE que se presentó en plena pandemia, otoño de 2020, de la que, quizás, se haga una segunda edición; son cuatro libros dentro de un estuche de cartón. Y la última un libro dedicado a Hellín «Paseos por Hellín», en dos volúmenes.

Ahora contesto a tu pregunta. Me apunté al Centro Excursionista de Albacete y comencé las rutas ¡duras! luego seguí por mi cuenta y he dado muchos cursos de senderismo. De rutas he publicado una docena de libros -actividad por la que soy más conocido-, pero he escrito de Historia, etnología, monografías de pueblos, poesía…

Ya sé tus respuestas anteriores, y lo que has contado en conferencias, sobre la riqueza de Albacete que no valoramos los paisanos. ¿Qué razón o razones puede haber? ¿Quizás el puto samuguismo, que parece estar desapareciendo? ¿Quizás que las autoridades tampoco han hecho nada al respecto? 

Como dijera Azorín «nos creemos nada siéndolo todo», pecamos de humildes, incluso hay a quien le da vergüenza decir que es de Albacete, quizás por los envenenados chistes o, ahora lo puedes ver, sólo nos nombran en las películas en tono satírico o «de cachondeo». Y nos reímos. Yo siempre lo he tenido claro: he nacido aquí y pongo mi granito de arena para enseñar al mundo lo que tenemos… que es mucho. 

Las autoridades, como dices, supongo que hacen lo que pueden, conmigo han cumplido, pero tengo tanto patrimonio archivado que quisiera que se conociera más. 

La otra faceta tuya es la de profesor, ¿cómo cambiaron las clases y los alumnos desde que te iniciaste?

Ya sabes que estoy jubilado hace una docena de años, vivo en la misma casa, pero ya estoy en «otra habitación». Sólo puedo decir que viví mi profesión con pasión, de hecho he seguido dando cursos gratuitos en la Universidad Popular de Hellín.

8).- ¿Qué faceta te ha llenado más de estas tus dos dedicaciones, aunque sólo una profesional?

Ambas se han complementado a la perfección. El ser profesor de Geografía e Historia me ha permitido aplicar los conocimientos a los lugares y rutas por donde he ido, entendiendo mucho mejor el paisaje (marco geográfico) y las gentes, depositarias de la historia y la etnología.

Es justo y necesario tocar el tema de tu faceta como escritor de cuentos y versos, ¿no? ¿En qué te inspiras?

Esta es una actividad nueva, también derivada de la pandemia. Los cuentos son para mi nieto gallego y son una excusa para contarle cosas de la tierra de sus antepasados y enseñanzas ejemplares que debe saber para hacerse hombre. La poesía, lógicamente, es una expresión de mis sentimientos más íntimos, esos que no solemos contar que, a través del poema quedan enmascarados; por eso a veces el lector no los comprende. Ahora estoy con un poemario que llamo «Luces y sombras», efectivamente las que todos tenemos.  

También dime tus aficiones a título particular.

La pintura y el mar. 

Y añades lo que te salga del pijo y quieras que refleje.

Para cerrar el círculo, agradecer a la Diputación la publicación del pendrive y «pedirle» que busque quien pueda hacer lo mismo con las 75000 fotos de los municipios.

Y, por supuesto, a la Casa de Albacete en Madrid, un referente necesario (no contingente).